2 tazas de harina para todo uso
2 cajas de Jiffy Chocolate Fudge Frosting Mix
2 tazas de nueces picadas
1 1/2 tazas de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
6 huevos grandes, a temperatura ambiente
1 1/2 tazas de azúcar
Para el glaseado:
3/4 taza de azúcar de repostería
1/4 taza de cacao en polvo sin azúcar
4 a 6 cucharaditas de leche
Precaliente el horno a 350° F. Ponga mantequilla generosamente en una sartén de 12 tazas de Bundt.
En un recipiente mediano, bata la harina y la mezcla para glasear. Agregue las nueces. Deje a un lado.
En el tazón de una batidora de pie equipada con el accesorio de la paleta, aplique crema a la mantequilla a velocidad media hasta que sea esponjosa y de color más claro, aproximadamente de 3 a 5 minutos. Agregue los huevos, uno a la vez, batiendo durante 30 segundos después de cada uno. Deténgase a menudo para raspar los lados del recipiente. Con la mezcladora funcionando a velocidad media, introduzca lentamente el azúcar. Una vez que esté todo dentro, continúe batiendo a velocidad media durante 3 minutos adicionales. Retirar el bol de la batidora y, con una espátula de silicona, añadir la mezcla de harina, glaseado y nuez hasta que no queden rayas de harina. Coloque la masa con una cuchara en la sartén preparada.
Hornee de 55 a 60 minutos, hasta que la parte superior esté lista. Es muy importante que no cocines demasiado este pastel y perderás el relleno fudgy.
Deje enfriar la torta en una sartén colocada sobre una rejilla durante 2 horas, luego retire la torta de la sartén para que se enfríe por completo.
Para el glaseado:
En un tazón pequeño, bata el azúcar, el cacao en polvo y la leche de los confiteros. Comience con la cantidad más pequeña de leche; agregue más si es necesario para alcanzar la consistencia deseada.
Rocíe el glaseado sobre el pastel enfriado. Deje reposar 20 minutos para que el glaseado se endurezca antes de servir.